Nuestro Dios le encomendó a José, el carpintero, la inmensa responsabilidad y el privilegio de ser el esposo de la Santísima Virgen María, además de ser el custodio de la Sagrada Familia.
De allí que sea el santo más cercano a Jesús y a la Virgen María, generándole muchos devotos y solicitudes para conseguir parejas.
Oración de San José para un Buen Esposo
Se le conoce como el «Santo del silencio«, pues no se conocen frases o palabras que hubiese expresado.
las buenas almas consienten que
los buenos matrimonios bajan del cielo.
Ante ti recurro humildemente,
al saber de la inmensa felicidad
por ser el hombre designado como el fiel,
protector y amante esposo de
la Santísima Virgen María.
Para que intercedas por mí
ante el señor y me ayudes a encontrar
un santo esposo
(o una santa esposa),
que nos amemos y la felicidad y
el entendimiento
entre nosotros sea nuestra base para
a amar y servir a Dios.
Concédenos a mí y futura
familia tu Celestial Bendición.
Por siempre te alabaré.
Amén.
Historia de San José
Es poca la información que se conoce sobre la vida de José antes de ser designado esposo de Maria y padre protector de Jesús.
Es nombrado en las únicas fuentes seguras de información que forman parte de la Revelación, en los primeros capítulos del evangelio de Mateo y de Lucas.
Siendo suficientes con ver sus actos de amor y fe, su obra de protección como el padre responsable del bienestar de su amadísima esposa y de su excepcional Hijo.
En los evangelios, San Mateo, le nombra como el hijo de Jacob y San Lucas dice que el padre era Heli.
Belén, la ciudad de David, fue posiblemente el lugar de nacimiento Por esto deducen que era originario de allí y además descendiente de David.
Sin embargo, en los Evangelios al comenzar la historia, José vivía en Nazaret, a poco tiempo antes de la Anunciación.
San Mateo y San Marcos, concuerdan que era un «tekton», palabra con la que se identificaban a los carpinteros de la época. También lo confirma San Justino, ya por tradición se ha aceptado esta interpretación.
Aún es discutido por los interpretadores críticos si el casamiento de él fue antes o después de la Encarnación, pero la mayoría de los comentadores, encabezados por Santo Tomás, y como dato bíblico más acertado, en la Anunciación, la joven María era solo prometida.
Por aquella época, los matrimonios se realizaban entre parejas muy jóvenes, por lo que es posible que tuviese entre 18 a 20 años cuando se desposó con la Virgen María. Ya mostraba ser un joven honesto, casto, humilde, justo y se desenvolvía en el oficio de la carpintería.
En las santas escrituras su matrimonio fue auténtico, y según San Agustín, al mismo tiempo, los cónyuges habían decidido permanecer en estado virginal.
En poco tiempo su fe fue puesta a prueba con el embarazo de María. Y aunque se desconocía el misterio de la Encarnación y no deseaba José exponer a su joven esposa ni al repudio ni a la condena de lapidación, pensó en repudiar en secreto a su amada esposa, cuando en sueños recibió la aparición de un ángel del Señor.
Diciéndole que no temiera tomar a María como su mujer, porque lo engendrado en ella es obra del Espíritu Santo. El obediente y lleno de fe, actuó como el ángel le había indicado.
Y de ahí en adelante, las obras para con la Virgen Maria y su hijo Jesús, eran desde su corazón lleno de fe, amor, lealtad, protección, cobijo y trabajo para llevar el pan a su familia.
En otras ocasiones, recibió apariciones del ángel del señor, poniendo en sobre aviso a la familia para buscarles protección a causa de la furia, envidia y obsesiones tiránicas de Herodes y otros.
A los que obedecía sin duda alguna, tomando la responsabilidad por la protección de la familia que Dios le había confiado.
Su familia pasaron dificultades muy grandes, teniendo que vivir en el exilio, sin el apoyo y compañía de sus familiares, sin entender el idioma, sufriendo prejuicios y obstáculos para hallar empleo, lo que les llevó a vivir en pobreza.
Dios hizo de este santo un ejemplo de humildad, al tener que vivir escondido con su sagrada familia y proveerles de alimentos con el trabajo de sus propias manos en su taller de carpintería.
Según los especialistas, es muy probable que hubiese fallecido antes que Jesús diera inicio a su vida pública, pues no asistió a las bodas de Canaá.
Y siendo ejemplo de lealtad y amor por su familia, de haber estado vivo, sin duda alguna acompañaría a su amada Maria al pie de la Cruz. Otro evento que indica que José ya había muerto fue la entrega que hace Jesús a San Juan, para él cuido de su madre.