El Pensamiento de él se basa en los conceptos de Aristóteles pero, adaptados al cristianismo.
Afirmando que el hombre es una unidad conformada por alma y cuerpo, coincidiendo con la dualidad platónica inspiración de la doctrina agustiniana.
Pensamiento de Santo Tomás de Aquino
El quien es considerado como uno de los más productivos autores del Medioevo y por supuesto con la mayor cantidad de trabajos conservados, se rige por las líneas esenciales del pensamiento de Aristóteles.
Sin embargo, su perfil como filósofo y teólogo cristiano requiere realizar modificaciones a esta teoría para responder a la inmortalidad del alma y abrir la posibilidad para que el alma temporalmente exista independientemente.
Es por ello que afirma que el alma es una sustancia independiente capaz de existir sin el cuerpo, pero definitivamente su destino es convivir como uno solo, al encontrarse con el cuerpo.
Con similitud a Aristóteles, establece que el alma, es única, es exclusiva. Residen en ella tres funciones: la vegetativa, la sensitiva y la racional.
Siendo la racionalidad la característica que define a la vida humana, por lo que es el principal criterio de la vida para lograr la dignidad humana y por ende la felicidad.
La ética y la moral, características del comportamiento humano, definen el entendimiento, la voluntad y la libertad, conformando la dimensión social de la vida humana.
En definitiva, es en esencia aristotélica con gran cantidad de rasgos agustinianos y por ende platónicos.
Relación entre Razón y Fe
Él reconoce que la razón y la fe son diferentes, no acepta que sean opuestos, si no más bien tienen una perfecta relación armoniosa.
No es posible que la razón y la revelación sean contradictorias porque ambas se originan de Dios, que no solo representa la Verdad, sino que es la verdad misma.
La filosofía y la teología gozan del mismo objetivo. Es Dios, considerado como la primera causa de todo ser viviente y es estudiado por medio de la razón, como luz natural. Orientando la salvación del hombre, mediante la luz natural de la revelación.
En su búsqueda inicia por establecer una clara distinción entre la razón y la fe. Admite que la razón solo puede conocer a partir de los datos de los sentidos, mientras que la fe, parte de la revelación divina.
Luego, fundamenta la idea que no existe contradicción entre la razón y la fe, pues la verdad racional y la de fe, no son contradictorias, porque la verdad es solo una.
Aunque nuestro santo, comenta sobre 2 tipos de verdades, las que son racionales o naturales, basadas en la razón humana. Y las que son proporcionadas o reveladas por la fe, son las sobrenaturales.
También identifica un doble orden de conocimiento, el filosófico y el teológico, diferenciados por sus objetos, los misterios escondidos de Dios y lo que es alcanzado por la razón natural.
La Existencia de Dios
La existencia de Dios, no solo es un artículo de fe, sino que representa un preámbulo o preparación de la fe, la cual puede ser demostrada empleando la razón.
Demostrando así la existencia de Dios, partiendo de la existencia real de las cosas, explicando su propia existencia como el efecto de una única causa. Refiriéndose a una demostración a posteriori.
Lo primero es explicado por lo posterior, es decir, la causa es explicada por sus efectos.
De este modo, postula cinco vías para evidenciar la existencia de Dios desde el principio que lo que sucede tiene una causa.
Estas demostraciones las basa en el principio de causalidad de Aristóteles, que indica que todo lo que se mueve es accionado por otro, pero existe debe existir primera causa la que no es causada, es decir, Dios.
- A partir del movimiento del mundo, hasta la inamovilidad del motor, es decir, se exige un primer motor para el movimiento del mundo.
- Partiendo de las causas subordinadas que a su vez son causadas, hasta la primera causa encausada, lo que indica que se exige una primera causa para la causalidad en el mundo.
- Desde la eventualidad del mundo hasta el ser necesario, diciendo que se exige un ser necesario para la contingencia de los seres.
- Partiendo desde los niveles de perfección de las criaturas, hasta el ser perfecto. E n esta vía , hace uso de elementos platónicos y neoplatónicos, como son los grados del ser y la perfección. Siendo Dios el modelo máximo imitado de forma imperfecta por las criaturas. Lo que resulta en que si Dios es la suprema perfección, entonces las criaturas imitan y son parte de esa perfección.
- Y por último, desde el orden del mundo en el que todos los seres actúan con un fin, hasta llegar a la suprema inteligencia ordenadora.
El Conocimiento
El conocimiento se basa en los principios aristotélicos, donde se estima que el conocimiento parte de la reflexión que se realiza en la experiencia sensible.
Donde no existe una limitante en los datos de los sentidos, la persona inicia con lo que se ofrece y continúa con un proceso de forma metódica y sistemática.
De igual forma que Aristóteles, también considera que el cosmos se conforma por una infinita cantidad de sustancias, estas a su vez se componen de materia y forma. Esta última, la forma, es la que da la esencia de la sustancia.
El engranaje del mundo se debe a la existencia de las formas, resultando que sin la existencia de estas no sería posible el conocimiento.
En fin, la teoría tomista del conocimiento, está basada en el elemento de abstracción del proceso de conocer.
Esta doctrina tomista del conocimiento se fundamenta en el modelo propuesto por Aristóteles, donde se cree en la existencia de un entendimiento agente, el cual es responsable de crear definiciones universales, ideas generadas por la imagen proporcionadas por los sentidos.
Además de un entendimiento paciente, el cual es responsable de retener las definiciones que emite el agente.
Estos entendimientos no son eternos, ni únicos ni comunes para todos los individuos y por lo tanto no existen independientes del mismo. Señala que el hombre particular desarrolla la acción de abstracción y es él quien conoce, porque de otra forma, el hombre individual solo quedaría en lo corpóreo puramente, negando entonces, la inmortalidad personal de su alma.
Esencia y Existencia
El modelo fundamental de Aristóteles no es íntegramente aceptado por Santo Tomás de Aquino. Por lo que trabaja en conceptos ajenos a él como por ejemplo la distinción esencia y existencia.
Para él, la esencia es aquello por lo que algo es lo que es, de forma independiente del hecho de existir o no existir. Entonces como la esencia puede existir o no existir, es una mera posibilidad de existencia.
Teniendo entonces que las esencias son incidentales, es decir, pueden o no suceder, no son indispensables.
Resultando que si las esencias no tienen coinciden con su existencia, no existen necesariamente, por lo que deben recibir la existencia de Dios, quien goza de total libertad para crear o no crear.